Santa Bárbara de Pruneres, iglesia románica datada del siglo XII o de principios del XIII. En el siglo XVII o XVIII la cubierta de piedra que conforma el edificio original fue desmontada y sobre ésta se colocó una más robusta, que podía ser útil para suavizar las duras inclemencias del clima, o servir de recinto defensivo en aquellos tiempos en que había altercados sociales. Esta pequeña iglesia tiene una panorámica excepcional sobre el Valle de Oix y los numerosos picos que lo circundan, así como de la espectacular cresta del Ferrán. Parece un lugar idóneo para ilustrar la leyenda de Santa Bárbara, martirizada y decapitada por su padre por su fervor cristiano. Como castigo divino el cruel progenitor fue fulminado por un rayo y por ello se relaciona esta santa con los rayos, los relámpagos y las tormentas.

La ruta se inicia en el mismo Oix, desde donde ascenderemos hasta Santa Bárbara de Pruneres, visitaremos la ermita y disfrutaremos de las maravillosas vistas del lugar. Seguidamente descenderemos hasta la ermita de Mare de Déu d’Escales y seguiremos hasta la cima del Ferràn, descendiendo por el otro extremo hasta Talaixà. Volvemos a Oix por la “Vall d’Hortmoier”, visitando los robles milenarios del Rey que se encuentran a mitad de camino.